El Betis se ha puesto rápidamente las pilas en materia de fichajes.
Necesitaba caras nuevas para cambiar el ánimo de una decepcionada
afición y, sobre todo, para convencer a Víctor Fernández, que quiere un
proyecto serio y ambicioso para ascender a Primera.
El entrenador y el club son conscientes de que hace falta una buena
'limpia'. Han llegado ya tres fichajes:
Salva
Sevilla,
el
pichichi Jorge Molina y
Momo.
Pero el problema está en la operación salida. De momento anda parada.
Sólo se han ido los jugadores que terminaban contrato.
tres fichajes: Salva Sevilla,
el pichichi Jorge Molina y Momo
El Betis necesita traspasar, pero no lo tiene nada fácil. Emaná,
Mehmet Aurelio, Ricardo o Sergio García, por poner algunos ejemplos de
futbolistas que tienen el cartel de 'Se vende', cuentan con fichas muy
altas y precisamente no se han revalorizado en los últimos tiempos. Se
esperaba con impaciencia que Emaná hiciera un buen Mundial para que su
cotización se incrementara, pero Camerún se fue a las primeras de cambio
a casa. Por ahí tampoco va a ser. Sea como fuere, la realidad es que
Emaná es el jugador que más mercado tiene, especialmente en Inglaterra y
Alemania.
La realidad es que tanto la secretaría técnica como Víctor Fernández
tienen pensado renovar casi la mitad de la plantilla. Al margen de los
cuatro jugadores que han terminado contrato -Capi, Rivas, Carlos García y
Sunny-, el número ideal de bajas que contempla el cuadro heliopolitano
es de diez más. Después, evidentemente, será el mercado el que dicte
exactamente cuántos jugadores se pueden marchar del Betis.
Lopera tiene ahora mismo parado el tema de fichajes. Entre sus
devaneos con Luis Oliver y el hecho de que todavía no haya sido capaz de
colocar a algunos de los transferibles, el dirigente verdiblanco ha
tenido que frenar la máquina. Además, los dos próximos nombres que están
encima de la mesa no vendrían gratis. Hace falta liquidez para afrontar
los fichajes de Matilla, el deseado por Víctor para el centro del
campo, y Nino, el complemento perfecto, según entienden en el club, para
Jorge Molina.